Esta publicación de hoy no va de jardinería. En el post de fecha 13/07/17 que llevaba por título "La granja de mis nietos" me comprometí, a contaros la bonita historia de una perrita llamada Chuly que os presenté en ese post, lo comprometido es deuda. El único problema es que a fecha de hoy ya no es una sola historia, sino dos. Así pues, paso a contaros estas dos bonitas y a su vez tristes historias que quedaran reflejadas para siempre y que sirvan de homenaje a mis dos grandes amigos. Al propio tiempo, ¡ojalá!, situaciones de este tipo no se vuelvan a repetir nunca más, ellos, ¡¡no lo merecen!!
A pesar de tener cada uno su cesta para dormir, les gusta dormir juntos. Las mantas las odian y las destrozan, no les dura ni un solo día.
Su nombre Chuly (hembra)
Como casi todos los días, uno más, de los muchos que suelo ir a tomar café y charlar un rato con algunos amigos, ¡estaba él ahí!, sentado en una mesa con su perrita. Llevaba días frecuentando esta cafetería con ella (una linda perrita) y me llamó desde el primer día la atención del cariño que se mostraban tanto uno como el otro. Existía una gran complicidad entre ambos hasta el punto que cualquiera lo podía apreciar.
Uno de los días, cuando hago acto de presencia, estaba como siempre con su perrita, pero sentado en la mesa con los amigos que suelo tomar café. A partir de ese momento y después de hacer las oportunas presentaciones, todos hicimos un poco de amistad con esa persona, la cual prefiero mantener su nombre en el anonimato, le llamaremos ficticiamente "Pedro." Si puedo decir, que es venezolano, aprecié rápidamente el acento que caracteriza a todos los sudamericanos. Sabía que no era español, pero desconocía su origen.
Después de vernos asiduamente y entablar algo de amistad, comentó un día, que llego a Alicante con su padre hace años, los negocios no les fueron nada bien y quedaron arruinados con la terrible crisis de la construcción "burbuja inmobiliaria" fueron muchos los que quedaron arruinados en aquella época, pequeños y grandes del sector de la construcción. En Venezuela, al parecer trabajaba en televisión, según comentó. Realmente, se apreciaba que es una persona con una cultura bastante buena. El padre, di por hecho que habría fallecido dada la edad que "Pedro" podría tener. Cobraba una mínima pensión con la que sobrevivía con su perrita en un local que le habían cedido para habitar. Al parecer, y según comentó, ese local, no reunía las condiciones mínimas de habitabilidad, aunque daba las gracias por disponer de un lugar donde cobijarse y no estar a la intemperie. Me habló, de una hermana que tiene en un pueblo de la provincia de Alicante. Jamás supe, si estuvo casado y tenía hijos.
Pasado los días, existía ya cierta confianza y me comentó, que le estaban ayudando para encontrar una residencia estatal donde poder estar y ser atendido y cuidado, ya que padece de una pequeña enfermedad derivada por el tabaquismo. Me alegré por él, porque por lo menos estaría atendido y cuidado. También le comenté, si alguna vez, por cualquier circunstancia tuvieses que deshacerte de la perrita, con sumo gusto me la quedaría. Yo sabía igual que el que a la residencia no se la podría llevar. Me confesó y contó, que esa perrita lo era todo para él. En cierta ocasión, estuve dispuesto a quitarme la vida y gracias a ella no lo hice, se lo debo todo. Le tengo conmigo porque cerca de donde habito unos drogadictos la tenían y maltrataban hasta que un día vi como la querían ahorcar, fui corriendo y le quité la soga del cuello, les dije que me la llevaba o llamaba a la policía para denunciarles y desde ese día somos inseparables. En ese preciso momento, comprendí la ternura que ambos se dispensaban. Realmente, tiene el cuello marcado por esa maldita soga.
A las pocas semanas, me confirma que ya tiene plaza en una residencia de Alicante, a lo que yo me alegré por él y le dije que allí por lo menos estaría bien atendido y alojado. Por la perrita le dije que no se preocupara, ya que estaría muy bien tratada y alojada como una reina. Él, lógicamente, quería saber donde iba a dejar a su perrita, así pues, andando fuimos a casa, ya que estábamos a 10' o 15' (minutos) de distancia andando. Cuando vio que se iba a quedar en una casa de campo rodeada de jardín, le dijo, vas a estar con esta familia y en este lugar como nunca has estado Chuly.
Siempre he tenido perros, casi todos han sido de raza pastor alemán, ¡preciosos! Ya nunca más quería tener perros porque esta zona donde resido es muy propensa a que los perros cojan la enfermedad de Leishmaniasis. Esta enfermedad para los que la desconozcan se transmite por la picadura de un mosquito que ya haya picado a un perro infectado. Hoy día, existen más tratamientos que hace unos años, antiguamente, llegaba un momento en el que no podías hacer gran cosa debido a que la medicación llegaba a un punto que no le frenaba la enfermedad a tu compañero/a y para no verle sufrir más, tenías que sacrificar. Todos en mi familia hemos pasado por esos traumas de tener que sacrificar a tu gran amigo/a. Así pues, me había prometido a mi mismo no tener ninguno más. Pero esa perrita tan cariñosa y atenta hizo mella en mí.
Llegó el día: el día que ya concretamos, tenía que llevarme la perrita a casa, cuando estábamos juntos en la cafetería le habló diciéndole (ahora te vas a ir con este buen amigo que te cuidará y vas a estar muy bien acompañada, le acarició y dándole un beso de despedida) la expresión de Pedro en su cara, lo decía todo, creo que ella, le entendió perfectamente por qué después de despedirnos, cogida de la correa nos fuimos andando sin darme ningún problema, eso sí, de vez en cuando se paraba y miraba hacia atrás la pobre.
Previamente, le dije, pues creo era mi obligación, si algún día, mejorara tu situación y la quieres recuperar, no tienes más que llamarme y con todo mi pesar la podrás recuperar, ten en cuenta que siempre cumpliré con mi palabra, ella es tu Chuly y lo seguirá siendo en la distancia. El día que te apetezca verla no tienes más que llamarme y nos reunimos en la cafetería sin ningún problema.
Y esta es la historia de esta encantadora y adorable perrita, ni que decir, que nos tiene un cariño inmenso, al igual que a mis hijos y nietos. Tiene controlados desde que me levanto hasta que me acuesto todos mis movimientos y los de mi mujer, simplemente le falta hablar.
De estos cinco años que le tengo aproximadamente, la ha visitado en un par de ocasiones que nos hemos visto en la cafetería, una de las veces, me ausenté un momento para ir al servicio y cuando regresé, me dijo que había estado inquieta, pendiente de mí hasta que me vio salir por la puerta, quizás, no debí haberlo hecho, igual pensó que ya más bien le había olvidado a él. Alguna que otra vez le he mandado alguna foto vía Whatsapp, entiendo y comprendo su postura de intentar verle lo menos posible.
Poli (macho) el amigo Poli, es un simpático perro cruzado de Jack Russell Terrier (no es el auténtico), es bastante más joven que Chuly y se llevan desde el primer día de maravilla. Este perrito, un día, mi hijo mayor, que es policía, iban en el coche patrulla de noche y con lluvia, y en la parte trasera de una gran superficie de un supermercado atado a una farola estaba el pobre animal solo y empapado de agua. Se acercaron y soltaron de la farola, lo introdujeron en el coche y se lo llevaron, ya que el supermercado estaba cerrado y no existía posibilidad que fueran a recogerle. Le tuvieron en el patio de la comisaria más de quince días dándole de comer y beber, pero nadie le reclamó. Comprobaron que llevaba un chip extranjero, pero al parecer, el animal no estaba muy legalizado. Así pues, después de ese tiempo transcurrido mi hijo me comentó si queríamos el perrito, que era muy bueno y cariñoso, a lo que mi mujer y yo le dijimos que sí, que lo trajera, así Chuly tendría también un amigo con el que jugar.
La cuestión es, que no quería tener ningún perro más por el problema comentado, pero al final y en poco tiempo tenemos estas dos preciosidades que no las cambiamos por nada del mundo. Este Poli es otra maravilla, cariñoso y sumamente inteligente.
Le pusimos Poli por aquello de que fue recogido por la policía.
Ya una vez en casa, le llevamos al veterinario donde se le hizo un pequeño reconocimiento.
De vez en cuando, me suele dar algún que otro disgusto con alguna planta, pero hemos firmado un buen pacto para que los destrozos sean los mínimos.
Al ser joven, es un poco travieso, las gallinas me las tiene estresadas, se planta delante del corral y no para de ladrarles. Hace unos días, estaba cogiendo los huevos y en un descuido se coló entre mis piernas y se llevó alguna que otra pluma, ¡menos mal! que es lo mínimo que pudo pasar, pero el susto que le dio a la pobre gallina no se lo quita nadie, ¡creo, que ese día no puso huevo!
Y estas han sido las dos historias que llevan consigo estos dos preciosos y cariñosos perritos.
Queridos amigos, como ya sabéis, suelo colocar pequeñas frases o pequeños poemas relacionados con la naturaleza, lo he estado haciendo para dar a conocer el otro blog que recoge todas esas frases o poemas, así pues, esta que comparto hoy será la última, ya que no tiene sentido publicarlas en los dos blogs. Si os apetece, con sumo agrado estaré encantado de recibiros y seguir leyéndonos también por retazosmios.com
Gracias por vuestra atención, un cordial saludo y abrazos para todos.
Chuly y Poli |
Su nombre Chuly (hembra)
Como casi todos los días, uno más, de los muchos que suelo ir a tomar café y charlar un rato con algunos amigos, ¡estaba él ahí!, sentado en una mesa con su perrita. Llevaba días frecuentando esta cafetería con ella (una linda perrita) y me llamó desde el primer día la atención del cariño que se mostraban tanto uno como el otro. Existía una gran complicidad entre ambos hasta el punto que cualquiera lo podía apreciar.
Uno de los días, cuando hago acto de presencia, estaba como siempre con su perrita, pero sentado en la mesa con los amigos que suelo tomar café. A partir de ese momento y después de hacer las oportunas presentaciones, todos hicimos un poco de amistad con esa persona, la cual prefiero mantener su nombre en el anonimato, le llamaremos ficticiamente "Pedro." Si puedo decir, que es venezolano, aprecié rápidamente el acento que caracteriza a todos los sudamericanos. Sabía que no era español, pero desconocía su origen.
Después de vernos asiduamente y entablar algo de amistad, comentó un día, que llego a Alicante con su padre hace años, los negocios no les fueron nada bien y quedaron arruinados con la terrible crisis de la construcción "burbuja inmobiliaria" fueron muchos los que quedaron arruinados en aquella época, pequeños y grandes del sector de la construcción. En Venezuela, al parecer trabajaba en televisión, según comentó. Realmente, se apreciaba que es una persona con una cultura bastante buena. El padre, di por hecho que habría fallecido dada la edad que "Pedro" podría tener. Cobraba una mínima pensión con la que sobrevivía con su perrita en un local que le habían cedido para habitar. Al parecer, y según comentó, ese local, no reunía las condiciones mínimas de habitabilidad, aunque daba las gracias por disponer de un lugar donde cobijarse y no estar a la intemperie. Me habló, de una hermana que tiene en un pueblo de la provincia de Alicante. Jamás supe, si estuvo casado y tenía hijos.
Chuli y Poli. |
Pasado los días, existía ya cierta confianza y me comentó, que le estaban ayudando para encontrar una residencia estatal donde poder estar y ser atendido y cuidado, ya que padece de una pequeña enfermedad derivada por el tabaquismo. Me alegré por él, porque por lo menos estaría atendido y cuidado. También le comenté, si alguna vez, por cualquier circunstancia tuvieses que deshacerte de la perrita, con sumo gusto me la quedaría. Yo sabía igual que el que a la residencia no se la podría llevar. Me confesó y contó, que esa perrita lo era todo para él. En cierta ocasión, estuve dispuesto a quitarme la vida y gracias a ella no lo hice, se lo debo todo. Le tengo conmigo porque cerca de donde habito unos drogadictos la tenían y maltrataban hasta que un día vi como la querían ahorcar, fui corriendo y le quité la soga del cuello, les dije que me la llevaba o llamaba a la policía para denunciarles y desde ese día somos inseparables. En ese preciso momento, comprendí la ternura que ambos se dispensaban. Realmente, tiene el cuello marcado por esa maldita soga.
A las pocas semanas, me confirma que ya tiene plaza en una residencia de Alicante, a lo que yo me alegré por él y le dije que allí por lo menos estaría bien atendido y alojado. Por la perrita le dije que no se preocupara, ya que estaría muy bien tratada y alojada como una reina. Él, lógicamente, quería saber donde iba a dejar a su perrita, así pues, andando fuimos a casa, ya que estábamos a 10' o 15' (minutos) de distancia andando. Cuando vio que se iba a quedar en una casa de campo rodeada de jardín, le dijo, vas a estar con esta familia y en este lugar como nunca has estado Chuly.
Perrita Chuly posando toda ella muy coqueta para la cámara. |
Siempre he tenido perros, casi todos han sido de raza pastor alemán, ¡preciosos! Ya nunca más quería tener perros porque esta zona donde resido es muy propensa a que los perros cojan la enfermedad de Leishmaniasis. Esta enfermedad para los que la desconozcan se transmite por la picadura de un mosquito que ya haya picado a un perro infectado. Hoy día, existen más tratamientos que hace unos años, antiguamente, llegaba un momento en el que no podías hacer gran cosa debido a que la medicación llegaba a un punto que no le frenaba la enfermedad a tu compañero/a y para no verle sufrir más, tenías que sacrificar. Todos en mi familia hemos pasado por esos traumas de tener que sacrificar a tu gran amigo/a. Así pues, me había prometido a mi mismo no tener ninguno más. Pero esa perrita tan cariñosa y atenta hizo mella en mí.
Chuly posando, se hace la interesante. |
Llegó el día: el día que ya concretamos, tenía que llevarme la perrita a casa, cuando estábamos juntos en la cafetería le habló diciéndole (ahora te vas a ir con este buen amigo que te cuidará y vas a estar muy bien acompañada, le acarició y dándole un beso de despedida) la expresión de Pedro en su cara, lo decía todo, creo que ella, le entendió perfectamente por qué después de despedirnos, cogida de la correa nos fuimos andando sin darme ningún problema, eso sí, de vez en cuando se paraba y miraba hacia atrás la pobre.
Previamente, le dije, pues creo era mi obligación, si algún día, mejorara tu situación y la quieres recuperar, no tienes más que llamarme y con todo mi pesar la podrás recuperar, ten en cuenta que siempre cumpliré con mi palabra, ella es tu Chuly y lo seguirá siendo en la distancia. El día que te apetezca verla no tienes más que llamarme y nos reunimos en la cafetería sin ningún problema.
Y esta es la historia de esta encantadora y adorable perrita, ni que decir, que nos tiene un cariño inmenso, al igual que a mis hijos y nietos. Tiene controlados desde que me levanto hasta que me acuesto todos mis movimientos y los de mi mujer, simplemente le falta hablar.
De estos cinco años que le tengo aproximadamente, la ha visitado en un par de ocasiones que nos hemos visto en la cafetería, una de las veces, me ausenté un momento para ir al servicio y cuando regresé, me dijo que había estado inquieta, pendiente de mí hasta que me vio salir por la puerta, quizás, no debí haberlo hecho, igual pensó que ya más bien le había olvidado a él. Alguna que otra vez le he mandado alguna foto vía Whatsapp, entiendo y comprendo su postura de intentar verle lo menos posible.
Perrito Poli. |
Poli (macho) el amigo Poli, es un simpático perro cruzado de Jack Russell Terrier (no es el auténtico), es bastante más joven que Chuly y se llevan desde el primer día de maravilla. Este perrito, un día, mi hijo mayor, que es policía, iban en el coche patrulla de noche y con lluvia, y en la parte trasera de una gran superficie de un supermercado atado a una farola estaba el pobre animal solo y empapado de agua. Se acercaron y soltaron de la farola, lo introdujeron en el coche y se lo llevaron, ya que el supermercado estaba cerrado y no existía posibilidad que fueran a recogerle. Le tuvieron en el patio de la comisaria más de quince días dándole de comer y beber, pero nadie le reclamó. Comprobaron que llevaba un chip extranjero, pero al parecer, el animal no estaba muy legalizado. Así pues, después de ese tiempo transcurrido mi hijo me comentó si queríamos el perrito, que era muy bueno y cariñoso, a lo que mi mujer y yo le dijimos que sí, que lo trajera, así Chuly tendría también un amigo con el que jugar.
La cuestión es, que no quería tener ningún perro más por el problema comentado, pero al final y en poco tiempo tenemos estas dos preciosidades que no las cambiamos por nada del mundo. Este Poli es otra maravilla, cariñoso y sumamente inteligente.
Le pusimos Poli por aquello de que fue recogido por la policía.
Ya una vez en casa, le llevamos al veterinario donde se le hizo un pequeño reconocimiento.
Poli el gamberro chupando cámara. |
De vez en cuando, me suele dar algún que otro disgusto con alguna planta, pero hemos firmado un buen pacto para que los destrozos sean los mínimos.
Al ser joven, es un poco travieso, las gallinas me las tiene estresadas, se planta delante del corral y no para de ladrarles. Hace unos días, estaba cogiendo los huevos y en un descuido se coló entre mis piernas y se llevó alguna que otra pluma, ¡menos mal! que es lo mínimo que pudo pasar, pero el susto que le dio a la pobre gallina no se lo quita nadie, ¡creo, que ese día no puso huevo!
Y estas han sido las dos historias que llevan consigo estos dos preciosos y cariñosos perritos.
Poli. |
Queridos amigos, como ya sabéis, suelo colocar pequeñas frases o pequeños poemas relacionados con la naturaleza, lo he estado haciendo para dar a conocer el otro blog que recoge todas esas frases o poemas, así pues, esta que comparto hoy será la última, ya que no tiene sentido publicarlas en los dos blogs. Si os apetece, con sumo agrado estaré encantado de recibiros y seguir leyéndonos también por retazosmios.com
Gracias por vuestra atención, un cordial saludo y abrazos para todos.
muy bonita historia, yo tambien tengo dos perros y los considero de la familia, son mis mejores amigos ellos nunca te fallan siempre estan a tu lado, lo malo viene cuando se hacen mayores y se te ponen enfermos, creo que no podria vivir sin ellos,es tanto lo que te dan a cambio de nada, gracias por compartir tu historia, buenas noches que tengas un buen descanso Juan un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus palabras amigo José Maria, realmente son tus mejores amigos y nunca te defraudaran.
EliminarUn abrazo y buena semana.
Amigo Juan, son dos bonitas historias que deemuestran el buen corazón que tienes tu y tu mujer al recojer a estos dos perritos que por motivos diversos se encuentran sin atención ¡y cómo se les quiere a las mascotas!
ResponderEliminarHe estado mal de salud, por eso he faltado bastante en los blogs, ahora ya estoy algo mejor.
Mil besos y abrazos.
Querida Montse, no sabía nada de tu situación, espero te encuentres mejor. Sí que me extrañó ver que no publicabas pero lo achaque a otras posibles causas. Me alegro mucho de tu mejoría y espero que no haya sido nada importante, será todo un placer poder seguir disfrutando de tus maravillosas publicaciones.
EliminarGracias por tus amables palabras.
Un fuerte abrazo mi querida amiga.
Una historia preciosa aunque triste también por Pedro que se tuvo que separar de su amiga tan fiel como son todos los perros, que dan más cariño que cualquier humano.
ResponderEliminarla verdad es que me encantan los perros, y me ha encantado el relato.
Un abrazo y buena semana.
Muchas gracias Elda, a estos grandes amigos se le coge un cariño inmenso, son tan leales y fieles que ellos lo darían todo por su dueño-amigo. Siempre están ahí, para lo bueno como para lo malo. Efectivamente Pedro lo pasó muy mal. Me ofrecí en su momento porque aprecie desde el primer día el cariño que ambos se tenían y no sé porque intuí que quizás algún día esta persona podría tener algún problema y presentarse el dilema que donde deja a su compañero, de ahí mi ofrecimiento a cuidar de Chuly. Cosas de la vida, ¿intuición? que sin saber nada me vino en ese momento a la mente.
EliminarGracias por tus palabras amiga Elda, te deseo igualmente una buena semana.
Un abrazo
Hermosos los dos. Y la historia, también... aunque me sacaste las lágrimas, porque sé lo mucho que sufrió ese hombre al desprenderse de Chuly. Es terrible separarse de esos amigos tan amados. Lo sé. Yo tengo a Cuca y hace dos años murió su compañero a los 18 años de edad. Todavía lo lloramos. Cuca se quedó muy triste sin él, le representaba todo. Vivía para mirarlo. Y yo jajaja. Él me sacó de una situación de terrible tristeza con su amor incondicional y su fidelidad.
ResponderEliminarUn abrazo y 2 besitos para tus compañeros caninos.
Acá les ponemos unos collares repelentes de mosquitos. Dura el efecto por 6 meses. Busca, a ver si por allá los venden. Oooo, aplícale
Vinagre, alcohol y agua a partes iguales, con un paño. Así no les pican. Una vez a la semana. No les afecta a su piel.
Realmente lo pasarías mal amiga Sara. Mi familia como cuento, hemos pasado por situaciones peores, la pérdida de un compañero/a es dura, pero tener que sacrificarle es mucho más duro, y esa dura experiencia por desgracia la hemos vivido en tres ocasiones, no quisiera tener que volver a pasar por ese trance nunca más. Amiga Sara, los collares antiparasitarios los han llevado siempre, además suelo comprar los mejores que no diré la marca para no hacer publicidad, vienen en una caja metálica herméticamente cerrada, pero cualquier collar por bueno que sea está más que demostrado que no son efectivos al 100x100.
EliminarGracias por tus palabras Sara.
Un abrazo
Bonito finalll para estos dos amigos peludos, en abril hará un año que Duda se nos fue al reino de las dudas, ella nos regaló 17 años de alegrías, pufff cuando se fué nos llevó un cachito de corazon y de alma, de hecho se llamó Duda porque teníamos una tremenda Duda si nos la íbamos a quedar o no.
ResponderEliminarAbrazote utópico.-
Cuando faltan se les echa mucho de menos, son encantadores grandes amigos tal vez no grandes, sino grandísimos amigos que llegan al corazón. También he pasado por ello.
EliminarUn gran abrazo amiga Irma.
Esos perrillos tienen suerte. Eres una gran persona. Un beso
ResponderEliminarAmiga Susana, ya no se trata de ser una gran persona, estos animales tocan mucho el corazón, la amistad, el amor y el compañerismo que te ofrecen suele ser difícil de encontrar en muchas personas. Te ofrecen absolutamente todo.
EliminarUn gran abrazo Susana.
Lindas historias Juan, nos dejas hoy en esta entrega, con su emotividad alentada por el ameno relato y que llegan al saber que en buenas manos, han depositado sus vidas y se siguen desarrollando y dejando de sus latidos el más dulce de los ladridos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias amigo y poeta Dionisio por tan gratas y bellas palabras. Siempre, tan bien recibidas y reflejadas con ese arte que te caracteriza.
EliminarUn abrazo amigo mío.
Querido amigo aunque creas que me olvidé de tí, no es así, mi madre tiene un problema de salud y salvo cuando mis hermanos pueden darme un pequeño descanso no puedo ocuparme de nada que no sea ella. Me encanta tu historia y como no, me encantan tus perritos, que gran suerte tuvieron de encontraros, sin duda serán muy felices. Vuestros actos dan fé de que sois personas maravillosas. Un enorme abrazo para ti y tu familia. Se me olvidaba del Madroño, es un árbol que en mi tierra crece en una zona determinada y allí lo hace en cantidad, son muy hermosos.
ResponderEliminarQuerida amiga Lola, para nada pensé que te habías olvidado, ni mucho menos, los amigos estamos para lo bueno y para lo malo. Imaginé, debías tener algún problema ya que hace tiempo que no publicas nada. Sabía de los problemas de tu madre y siempre estás tú al pie del cañón. Estas cosas se suelen hacer largas y no es justo que recaiga todo el esfuerzo siempre en la misma persona, creo que todos deben de colaborar en mayor o menor medida y darte a ti un respiro que te lo mereces.
EliminarEspero la pronta recuperación de tu madre, dentro de nada tenemos la primavera y cambiará el tiempo que me imagino será beneficioso para ella.
Gracias por tus adorables palabras querida amiga y recibe un afectuoso abrazo con todo mi cariño.
Bonitas historias Juan. Hace un tiempo tuvimos nuestra última perrita, ya son dos años que murió y pensamos no volver a tener más perros, pero cuando veo alguno solito abandonado me da una pena... que me estoy pensando lo que dije. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias Teresa, al final te harás con uno, pero siempre hazlo de los que están para adoptar. Siento mucho la muerte de tu perrita, se les hecha mucho de menos.
EliminarUn fuerte abrazo amiga.
Una hermosa y emotiva historia.
ResponderEliminarYo echo mucho de menos a mi mascota que murió en el 2015.
Son muy fieles y nobles.
Me encantó leerte. Un gran corazón.
Un fuerte abrazo.
Así es amiga Amalia, se echan mucho de menos, son tan cariñosos, inteligentes y sobre todo muy nobles.
EliminarGracias por tus gratas palabras.
Un fuerte abrazo amiga.
Hola amigo Juan: A very touching and heartwarming story of these two dogs and your devotion to them. It reveals the sensitivity that we knew you had and that you are concerned with every creature, big and small. Your heart is very big querido amigo Juan. Recibe un fuerte abrazo de tu siempre amigo y compadre, David
ResponderEliminarDear friend David, thanks for your words. These creatures are tremendously tender, perhaps, of the best friends of the human being. When they fail, they leave a great void.
EliminarWe are delighted with this new couple at home that give so many satisfactions.
A big hug friend and compadre David.
Querido amigo David, gracias por tus palabras. Estas criaturas son tremendamente tiernas, quizás, de los mejores amigos del ser humano. Cuando llegan a faltar dejan un gran vacío.
EliminarEstamos encantados con esta nueva pareja por casa que tantas satisfacciones dan.
Un fuerte abrazo amigo y compadre David.
Hola, Juan. Gracias por compartir las entrañables historias de estos dos animalitos, que tanto y bueno nos regalan.
ResponderEliminarYo nunca tuve "nieta" hasta hace tres años, que una de mis hijas se marchó fuera a terminar sus estudios, y allí se quedó trabajando. Si, no me he equivocado en lo de nieta, porque cuando mi hija se despidió, nos pidió que la cuidáramos como si fuera una nieta, que ella nos dejaba, y así lo hemos hecho. Como no me quiero extender mucho, te diré tan solo que se parece a tu "Chuly", que se llama "India" y que hoy en día, es ella la que parece que nos cuida a nosotros, convertida en la alegría de la casa.
Un abrazo.
Ya lo creo Manuel, seguro que os cuidará y os amará. Estos animales tienen un instinto muy especial. Son los verdaderos amigos, que no te quepa la menor duda.
EliminarUn abrazo desde Alicante.
Amo los perros, tengo 3 y los trato como una parte de nuestra familia 💖💖 Bellas, emocionantes historias 💖
ResponderEliminarLo veo muy bien amiga KInga, ellos forman parte de la familia.
EliminarGracias por pasar y por tus palabras.
Un abrazo
Gracias Juan por contarnos la historia de tus dos perritos. Gran suerte han tenido en caer en tu casa.
ResponderEliminarNosotros adoptamos tres gatos. Los cogimos al dejar de mamar. La gata va hacer 6 años los gatos tres.
Los tenemos en el huerto y todos los días vamos a verlos. En el momento que sienten el coche ya están esperando en la puerta. Hoy nos alegramos de haberlos cogido.
Te deseo buena noche.
Un abrazo.
Gracias por tus palabras Laura. Los animales son muy agradecidos y suelen dar grandes satisfacciones, seguro que esos gatitos os lo demuestran en todo momento.
EliminarUn fuerte abrazo amiga y buen resto de semana.
nice blog guys..
ResponderEliminarGracias Kamil.
EliminarCordiales saludos.
Buena lección de cómo transmitir dos historias conmovedoras que se entrecruzan en un sólo texto. Dará igual que sean de humanos o animales, lo importante es que son dos seres vivos que saben de cariños y olvidos, que sufren porque la vida puede separarlos y se alegran de haber encontrado nuevos amigos. Dichosos los que hacen lo que les dicta el corazón sin preocuparles si los extraños entenderán o no sus acciones.
ResponderEliminarFelicidades y un abrazo.
Gracias por tus palabras amiga Ana. Creo que en la vida es fundamental obrar con lo que te dicte tu conciencia o experimente tu corazón.
EliminarGracias y un fuerte abrazo.
Tu historia es digna y poderosa como tantas otras cuando se hacen verdaderos lazos entre personas y los hermanos menores, como dice mi hermano quien es amante de perros y gatos...yo he tenido perros , dos, pero se me fueron y ya no quiero sufrir así...pero se me allegan los animales solos, de hecho tengo un perro de la calle que me cuida y sigue alrededor de mi casa y ahora descubro un gato romano que aloja en mi techo...
ResponderEliminarSin dudas los animales siempre dejan huellas del mejor amor.
Lindos días.
Esos animales callejeros son los mejores Meulen, seguro que están pendientes de ti. Me alegra te gusten las dos pequeñas historias.
EliminarUn fuerte abrazo y buena semana.
Los perros no solo son compañeros leales y juguetones, sino que también se convierten en parte esencial de nuestra familia. Su presencia nos brinda consuelo en momentos difíciles y nos ayuda a mantenernos activos y felices. La conexión que formamos con ellos es profunda y significativa, convirtiendo cada momento compartido en recuerdos valiosos y únicos.
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